Osteoartritis y artrosis en perros: causas, síntomas y cómo cuidarlos

La osteoartritis, también llamada artrosis, es una de las enfermedades articulares más frecuentes en perros. Aunque no tiene cura, con un buen manejo tu perro puede seguir teniendo una vida cómoda y feliz. En este artículo te contamos en breve lo que necesitas saber sobre esta enfermedad.
¿Qué es la osteoartritis canina?
Se conoce como osteoartritis al desgaste progresivo del cartílago que recubre las articulaciones. Cuando este cartílago se daña o desaparece, los huesos rozan entre sí, generando dolor, rigidez e inflamación. Puede afectar a una o varias articulaciones, y su avance es lento pero constante.

Causas más comunes
- Edad: el desgaste natural de las articulaciones es inevitable con los años.
- Lesiones previas: fracturas, luxaciones o roturas de ligamentos pueden dejar secuelas que terminan en artrosis.
- Sobrepeso: un perro con kilos de más sobrecarga sus caderas, rodillas y codos, acelerando el daño.
- Genética y razas predispuestas: Labrador Golden Retriever, Pastor Alemán, San Bernardo y Gran Danés, entre otras, tienen mayor riesgo.
- Problemas ortopédicos: displasia de cadera, displasia de codo o luxación de rótula favorecen la aparición de osteoartritis.
Etapas de la enfermedad
- Inicial: rigidez leve, molestias ocasionales después del ejercicio.
- Moderada: cojera frecuente, evita saltar o subir escaleras.
- Avanzada: dolor crónico, dificultad para caminar y pérdida de masa muscular.
Síntomas que debes vigilar
- Cojera o renguera intermitente
- Rigidez al levantarse o tras descansar
- Dificultad para saltar o subir escaleras o muebles
- Dolor al tocar ciertas zonas
- Hinchazón o calor en la articulación
- Menos ganas de jugar o salir a pasear
- Cambios de ánimo o mayor irritabilidad

¿Cómo se diagnostica?
Tu veterinario comenzará con un examen físico, observando cómo se mueve tu perro y palpando las articulaciones. Las radiografías son la prueba más común para confirmar el diagnóstico, ya que permiten ver el estado de los huesos y el espacio articular. En algunos casos se realizan pruebas adicionales para descartar otras causas de dolor, como análisis de sangre o de líquido articular.
¿Qué tan peligrosa es?
No es una enfermedad mortal, pero sí compromete seriamente la calidad de vida de tu mascota. Un perro con dolor crónico tiende a moverse menos, lo que puede generar obesidad, pérdida de masa muscular y problemas emocionales.
Diferencia entre artritis y artrosis
- Artrosis u osteoartritis: enfermedad degenerativa por desgaste del cartílago.
- Artritis: inflamación articular en general, que puede deberse a infecciones, traumatismos u otras causas.
Tratamiento para la osteoartritis
El tratamiento combina varias estrategias:
- Control del peso: bajar kilos de más es clave.
- Ejercicio moderado: paseos cortos y frecuentes, natación o juegos tranquilos.
- Fisioterapia: masajes, calor local, hidroterapia. Terapias no complementarias como acupuntura
- Medicamentos antiinflamatorios: recetados por el veterinario.
- Suplementos articulares: glucosamina, condroitina, omega 3.
- Anticuerpos monoclonales: como Librela, una inyección mensual que bloquea el dolor articular con muy buena tasa de respuesta.
Recuerda: siempre debes evaluar con tu médico veterinario antes de aplicar un medicamento, ya que podrían tener efectos secundarios.
¿Tiene cura la osteoartritis canina?
No, pero sí se puede controlar y ralentizar su avance. Con tratamiento adecuado, un perro con artrosis puede vivir muchos años de forma plena.
¿Puede mi perro vivir cómodamente con artrosis?
Sí. Con controles veterinarios, medicamentos cuando son necesarios y adaptaciones en casa, los perros pueden mantenerse activos y felices.
¿Hay remedios caseros para la artrosis canina?
La artrosis no se cura con remedios caseros, pero sí puedes aplicar cuidados en casa que ayudan a mejorar la calidad de vida de tu perro:
- Facilitar la movilidad: coloca rampas para subir a sillones o camas y usa superficies antideslizantes para que no resbale.
- Aliviar el dolor y la rigidez: aplicar calor local con un guatero envuelto en una tela suave puede reducir la molestia en días fríos. También existen mantitas térmicas o polainas que ayudan a mantener las articulaciones calientes.
- Apoyo nutricional:
- Patas de pollo cocidas y deshuesadas, como fuente natural de colágeno, pueden apoyar la salud articular si se incorporan desde edad temprana.
- El caldo de hueso casero (sin sal, cebolla ni condimentos) es rico en colágeno y minerales, y puede complementar la dieta aportando nutrientes que favo recen el cartílago.
- Descanso adecuado: una cama ortopédica reduce la presión sobre las articulaciones.
- Ejercicio suave: paseos cortos y regulares ayudan a mantener las articulaciones en movimiento. Piso apto para pacientes con movilidad reducida como piso de goma eva
Importante: estos cuidados son complementarios y nunca deben reemplazar la medicación o tratamientos recetados por el veterinario.
En conclusión: la osteoartritis no se cura, pero sí se controla. Con atención temprana, tratamientos modernos y cambios sencillos en casa, tu perro puede seguir disfrutando de la vida con la mejor calidad posible.
¿Te gustaría comenzar a tratar la artrosis de tu regalón? Con CuidaPet puedes hacerlo agendando una consulta veterinaria a domicilio hoy mismo, para que revisemos su condición y te ayudemos a darle la mejor calidad de vida.
Referencias
Osteoarthritis in Dogs, American College of Veterinary Surgeons.